¿Por qué se dice “el agua” y no “la agua”? ¿Es “agua” una palabra masculina o femenina?

  • El agua estaba demasiado fría para mi gusto.
  • Me dijo que necesitaba beber mucha agua.
  • La agitada agua me llenó de energía.


¿De qué género es la palabra “agua”?

El cuerpo humano está compuesto en un 60 % de agua y nuestro cerebro, en concreto, en un 70 %. Nos recomiendan beber, como mínimo, dos o tres litros de agua al día. Nos duchamos y bañamos con agua. Disfrutamos del agua del mar o del océano cuando tenemos ocasión, necesitamos del agua de la lluvia para poder vivir… Y, aun así, no sabemos mucho de esta palabra o, al menos, dudamos de si la palabra agua es una palabra de género femenino o masculino y de si debemos referirnos a este término usando un artículo masculino o femenino. Es decir, no sabemos si se escribe el agua o la agua

Nos suena que el agua es la opción correcta e instintivamente decimos el agua y no “la agua”, pero cuando nos paramos a pensarlo y analizarlo no sabemos por qué una palabra de género femenino lleva el artículo masculino el delante. Hoy abordaremos esta cuestión.

¿Conoces algún otro refrán que incluya la palabra “agua”?

Como acabamos de adelantar, la palabra agua es un nombre común de género femenino que viene del término latín equivalente “aqua”. Estas son algunas de sus principales acepciones, según la RAE, la Real Academia Español:

1) “Líquido transparente, incoloro, inodoro e insípido en estado puro, cuyas moléculas están formadas por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno, y que constituye el componente más abundante de la superficie terrestre y el mayoritario de todos los organismos vivos. (Fórmula: H₂O)”

2) “Líquido que se obtiene por infusión, disolución o emulsión de flores, plantas o frutos, empleado como refresco o en medicina y perfumería”

3) “Lluvia (acción de llover)”

4) “Vertiente de un tejado”

5) “Mar, marea (movimiento periódico de las aguas del mar)”


¿Se dice “el agua” o “la agua”?: ejemplos

Aunque agua sea una palabra de género femenino, estamos acostumbrados a escuchar y leer oraciones en las que aparece junto a un artículo masculino. Estos son algunos ejemplos de la palabra femenina agua más un artículo masculino:

El agua estaba clarísima.
Tengo miedo del agua, nunca me baño en el mar.
¿Me acercas el agua, por favor?
El agua estaba brava por el temporal.

¿Y por qué sucede este curioso fenómeno? El motivo es que el sustantivo de género femenino agua comienza por “a” tónica. Es decir, la vocal donde recae el acento de intensidad cuando pronunciamos la palabra agua es en la letra “a” inicial.

Esto no es muy habitual, pero ocurre también en otras palabras de género femenino como área, hacha, etc. que también se escriben con el artículo el, como el área o el hacha.

Por motivos de fonética histórica se decidió que este tipo de palabras no se escribieran con la delante, sino con el.

Sin embargo, si añadimos otro tipo de palabra, por lo general un adjetivo, entre el artículo y el nombre, el artículo deja de ser masculino y pasa a ser femenino. Los adjetivos que vayan entre el artículo y el nombre también deberán concordar en femenino con la palabra agua. Por ejemplo:

El agua.
La profunda agua del mar.
El agua profunda del mar.
El agua.
La terrorífica agua del océano.
El agua terrorífica del océano.

Cuando preferimos usar un artículo indefinido (es decir, un, una, unos, unas), es conveniente también adaptarlo y usar, de nuevo, su forma masculina un en lugar de una delante de la palabra agua. Sin embargo, en este caso, la RAE nos aclara que la forma una agua es correcta, aunque menos común. 

Ejemplos de uso correcto de: “el agua” o “la agua”.

En el caso de los indefinidos, alguna, alguno, ninguno o ninguna, se aceptan tanto la forma masculina como la femenina. Veamos algunos ejemplos:

Ninguna agua me parece tan rica como esta.
Ningún agua me parece tan rica como esta.
No cabía un alma.
No cabía una alma.
Ningún ala soporta tanto peso.
Ninguna ala soporta tanto dolor.

Por último, recuerda que debes usar las formas femeninas de los demostrativos o de cualquier otro adjetivo determinativo junto a la palabra agua, es decir: 

Aquella agua
Esa agua
Esta agua
Mucha agua
Otra agua
Poca agua
Toda agua

Jarabe de Palo: “Agua” 


Reglas de ortografía de los nombres femeninos que empiezan con “a” tónica

Después de analizar los consejos ortográficos que tienes que tener en cuenta a la hora de escribir la palabra agua, queremos hacer un breve resumen de las reglas ortográficas y gramaticales principales relacionadas con los sustantivos femeninos que empiezan por “a” tónica o “h” más “a”:

1) Se suele adoptar la forma el antepuesta a un nombre común: el hacha, el águila, etc.

2) Si se intercala otra palabra, como un adjetivo, entre el nombre y el artículo, entonces se usa la forma femenina: la misma hacha, la fascinante águila, etc.

3) Se siguen concordando los adjetivos y otros elementos en femenino.

4) En su forma plural, se utiliza las: las hachas, las aguas, las almas, etc.

5) Si empleamos un diminutivo (agüita, almita, etc.), usaremos la forma la, ya que la letra “a” deja de ser tónica.

6) Con un, algún, ningún podemos emplearlos tanto en masculino como en femenino, aunque su escritura en femenino es menos habitual.

7) Otra, toda, mucha, poca, etc. se emplean en femenino.

8) Cuando se trate de una sigla que comienza por “a”, es conveniente emplear el artículo que corresponde al desarrollo de la sigla. Por ejemplo: la APA por “la asociación de padres de alumnos”.

¡Recuerda!

  • Todas estas reglas solo son válidas si la “a” o la “h” inicial de la palabra femenina es tónica. Como ocurre con agua, alma, hacha, arma, etc.
  • Si es átona, como con la palabra harina, se seguirá utilizando: la harina y las harinas, la blanca harina, etc.

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Resumamos:

  • Agua es un nombre común de género femenino.
  • Sin embargo, se utiliza el artículo definido masculino el y no la delante de la palabra agua. Es decir, es correcto escribir el agua y no “la agua”.
  • En el caso de los artículos indefinidos un o una, se aceptan ambas formas, pero se recomienda utilizar la forma masculina: un agua.
  • Lo mismo ocurre con los indefinidos: ningún o ninguna, algún o alguna.
  • Con los demostrativos o adjetivos determinativos, debe emplearse la forma femenina: poca agua, mucha agua, aquella agua, otra agua, etc.